El hilo rojo: conoce cómo nació esta misteriosa leyenda

“Un hilo rojo invisible conecta a aquellos que están destinados a encontrarse, sin importar tiempo, lugar o circunstancias. El hilo se puede estirar o contraer, pero nunca romper” dice la leyenda vinculada al mito del hilo rojo que tiene su origen en la cultura oriental. 

Según el mito, las relaciones humanas están predestinadas por un hilo rojo que los dioses atan al dedo meñique de aquellos que tienen como objetivo encontrarse en la vida. Si el destino tiene preparado que te encuentres con una persona en específico, así será; no importa cuánto tiempo pase o las circunstancias que se encuentren en la vida. 

Una de estas leyendas cuenta que un anciano que vive en la Luna sale cada noche a buscar recién nacidos para atarles un hilo rojo de forma que en algún momento de sus vidas se encontrarán. De alguna forma, el hilo rojo sería la guía que ayudaría a las personas a encontrar el amor de su vida. ¿Y cómo sabrás que es la persona indicada? Simplemente lo sabrás, sentirás paz interior y la alegría que invadirá tu ser no tendrá comparación. 

Otra de las leyendas más famosas sobre el hilo rojo cuenta la historia de cómo un emperador conoció a la que posteriormente se convertiría en su esposa, gracias a una poderosa hechicera capaz de ver el hilo rojo. El emperador le pidió que siguiera a su hilo rojo para conocer a la mujer de su destino y así lo hicieron. La búsqueda de la bruja llevó al emperador a un mercado donde una pobre campesina sostenía a una bebé en brazos por cuál creyó que era una broma de mal gusto y empujó a la campesina haciendo que la bebé cayera al suelo, producto de eso terminó con una gran herida en la frente. La bruja fue condenada a muerte y el episodio fue olvidado hasta que, muchos años después, el emperador debía casarse y su corte le recomendó la hija de un poderoso general. Para su sorpresa, el día de la boda, al ver la cara de la novia se dio cuenta de una realidad: la mujer tenía una cicatriz particular en la frente, producto de una caída de bebé. 

Lo que deja como moraleja que no podemos escapar a nuestro destino nisiquiera en el amor. El hilo rojo no es visible porque no necesitamos verlo, sólo debemos esperar nuestro momento y no correr a buscar nuestro destino.

¿Te has preguntado por qué justamente el dedo meñique? Indican que todo tendría que ver con la sangre: la arteria cubital conecta nuestro corazón con el dedo meñique. Y según la leyenda, esa vena que vendría a ser el hilo rojo se extendería por el mundo hasta unirse a la arteria y llegar al corazón de otra persona. Pero no sólo se limita a conexiones de pareja, sino que también determina todas las relaciones con significado que podríamos tener en nuestra vida: mejores amigos o alguien que nos causará o causaremos impacto. 

Y tú, ¿te has preguntado a quién le corresponderá tu hilo rojo?