Recomendaciones para cerrar el ciclo después de una ruptura amorosa

Todas las personas, en algún momento de sus vidas, atraviesan por una ruptura amorosa. Estas situaciones suelen manifestar los problemas de apego y traumas no resueltos que cada quien tiene, y si no se da el tiempo correcto para procesar completamente la ruptura y cuidar de una misma, es posible que se queden estancados algunos sentimientos no resueltos.

Si estás pasando por una ruptura, es probable que estés familiarizado con el proceso de revisar mentalmente todas las cosas que sucedieron en el transcurso de esa relación que terminó. Ese proceso incluye notar todos los diferentes sentimientos que están asociados con la ruptura.

¿Cómo llegar realmente al cierre?

En primer lugar, es necesario entender que estar en una relación es una experiencia continua de contacto con otra persona. Y al igual que se necesita tiempo para aprender a amar a esa otra persona, se necesita tiempo para dejarla de amar y cortar el apego. Sé paciente y compasiva contigo misma y date el tiempo que sea necesario para sanar.

Sé consciente de que, aun sin pareja, eres un ser completo, debes darte cuenta de que tienes la capacidad de ser feliz y trabajar para crear esa felicidad. Aprovecha ese tiempo de soltería para dedicarte atención, amor y cuidado hacia ti misma.

Hay que aceptar poco a poco, vivir un día a la vez mientras te adaptas a que esa persona ya no está contigo, mientras aprendes a seguir tu camino por tu cuenta y a crear nuevas costumbres en solitario. No hay una única forma de procesar el final de una relación, encuentra tu proceso personal y respeta tus tiempos para sanar y aceptar.

Superar una ruptura lleva tiempo, ya que el cariño, el apego e incluso el deseo por la otra persona no se detiene de inmediato, aunque la relación ya haya terminado.