Vape en jóvenes: El nuevo peligro que se ha convertido en tendencia a nivel mundial
El vape se ha caracterizado por ser uno de los aparatos más usados entre los que lo ven como una alternativa al cigarro.

El vape se ha caracterizado por ser uno de los aparatos más usados entre los que lo ven como una alternativa al cigarro.
Durante los últimos años, el vapeo se ha vuelto parte de la cotidianidad de muchos jóvenes que buscan seguir nuevas tendencias. Dispositivos con diseños llamativos, sabores que van desde sandía hasta algodón de azúcar. La narrativa que brinda este moderno dispositivo es que ofrece una alternativa más sana. Sin embargo, esto es totalmente falso y es uno de los problemas en los que se puede desencadenar en un futuro.
Aunque el vape parece un artículo de moda y que tiene que ir combinando con la esencia de la modernidad, lo cierto es que puede ser un peligro para muchos jóvenes que podrían sufrir de diversos problemas relacionados con el tabaquismo.
Según el estudio respaldado por la Organización Mundial de la Salud, aquellos que comienzan a usar el vape, tienen una probabilidad tres veces mayor de engancharse al cigarro convencional y lo preocupante es que muchas veces todo empieza con excusas mínimas: “solo lo hago en fiestas”, “es sin nicotina”, “no pasa nada”.
Muchos dispositivos contienen nicotina en altos niveles, incluso más que algunos cigarrillos. Y si tu cuerpo se acostumbra a ese estímulo, es fácil que empiece a pedir más. Ese “más” puede venir en forma de una cajetilla.
Más allá de la adicción, el vapeo puede provocar daños pulmonares, irritación en garganta y encías, y aumentar el riesgo de enfermedades respiratorias. Aunque los efectos a largo plazo aún se investigan, ya se han documentado casos de jóvenes hospitalizados por complicaciones relacionadas con el vape.
Y no solo es un tema de salud física: también influye en tu bienestar mental. Estudios recientes asocian el consumo frecuente de nicotina con mayor ansiedad, insomnio y problemas de concentración.
El marketing del vape está hecho para enganchar. Publicidad colorida, influencers mostrando “humos artísticos” en TikTok, y hasta ediciones limitadas con diseños coleccionables. Todo apunta a un mismo objetivo: normalizar. Pero detrás del glitter y el sabor a frambuesa, hay una industria que lucra con la adicción.
apear no es menos malo, ni es un paso hacía dejar de fumar. Para muchas chicas jóvenes, ha sido exactamente lo contrario: el primer paso hacia una dependencia que nunca planearon tener. Es en este sentido, que se recomienda dejar de usar este tipo de contenidos o dejarlo de manera pausada. Es importante resaltar que debes conocer el problema que conlleva usar estos aparatos electrónicos.